Día Noveno de Noviembre

                        

Caridad.

“Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón. Este es el mayor y el primer mandamiento, y el segundo es semejante a éste: Amarás a tu prójimo como a ti mismo”. — San Mateo. 22:38

Hay algunos que se atormentan buscando el arte de amar a Dios; no saben que no hay otro arte, ningún otro medio que amarle, es decir, hacer lo que más le agrada. — San Francisco de Sales

Fue por una admirable exactitud en la observancia de la ley de Dios que San Vicente de Paúl llegó a tan grande amor. Se vigilaba continuamente a sí mismo. Era mortificado en sus pasiones, justo en sus juicios, circunspecto en sus palabras, prudente en su conducta, puntual en sus prácticas de piedad y perfectamente unido a Dios. Podríamos decir que su vida fue un continuo sacrificio a Dios, no sólo de los bienes de este mundo, sino también de todo lo que había recibido de la mano generosa de Dios, de todas sus iluminaciones, sus afectos, sus deseos. No deseaba nada más que que Dios fuera perfectamente conocido y glorificado, y que su voluntad se cumpliera en todo tiempo, en todo lugar y por toda clase de personas. Sólo a este fin dirigió todos sus designios, todas sus palabras y todas las acciones que realizó..

Oración

Dios mío, no dejaré de hacer, por amor a Ti, todo lo que sé que te es agradable. Deseo estar siempre unido a Ti en corazón y mente, para poder actuar siempre para Tu gloria..