Confianza - Día Vigésimo segundo de Octubre

         

Confianza
"Ten confianza" San Marcos 6, 50

Cuando nos encontramos en peligro, no debemos perder el valor, sino confiar mucho en Nuestro Señor. Cuanto mayor es el peligro, más cercana está la ayuda de Aquel que se llama a sí mismo nuestra ayuda en la tribulación.- San Ambrosio

San Ignacio estaba en el mar en un momento en que se desató una gran tempestad. Las velas del barco estaban hechas pedazos; todos a bordo, excepto el santo, estaban asustados y llorando; no esperaban nada más que la muerte. Sólo San Ignacio estaba tranquilo y sin miedo. Estaba tranquilo porque en su mente estaban presentes estas palabras: “ Los vientos y el mar obedecen al Señor. “La tempestad no se levantó sin Su permiso”, dijo, “y sin ella no podemos perdernos. El Señor es el amo. Si Él quiere que perezca en las aguas, lo consiento, lo haré. Confío en su misericordia”..

Oración

Dios mío, concédeme no perder el valor en el momento del peligro. Me acordaré entonces de que eres llamado nuestro auxilio en la tribulación , y en Ti confiaré. Cuando camine en sombra de muerte, no temeré los peligros que me acechan, recordando que tú estás conmigo.